Naturalista y fotógrafo, Luís Manuel Iglesias (www.luismanueliglesias.com) quizá sea más conocido por su especialización en macro. No en vano todo el mundo habla maravillosamente de su libro «Fotografía de Aproximación en la Naturaleza«. Pero su buen hacer se extiende también por otras disciplinas. De hecho comenzó con la fotografía de aves.
A continuación podéis leer la entrevista que nos ha concedido a Caborian, acompañadas de una estupenda selección de fotos.
SLR Digital, 24mm, ISO 100, cable disparador, reflector, f:16, velocidad 1/80
Para empezar por “el principio”, cuéntanos un poco cómo llegaste a la fotografía. Qué buscabas entonces y qué buscas ahora.
Durante toda la infancia sentí una atracción tremenda por la naturaleza, de hecho mientras mis compañeros jugaban yo me afanaba en la búsqueda insaciable de insectos, arañas y todo lo que se me pusiera por delante. Cuando contaba con dieciocho años cayó en mis manos una cámara manual que mi padre había comprado en Alemania. Con ella, me di cuenta del potencial de la fotografía para mostrar a los demás las joyas que la naturaleza me brindaba. Ahora, la fotografía representa también otros valores; como la creatividad, pero me apasiona captar con la cámara imágenes de comportamiento que resultan fascinantes.
Cómo fue tu cambio de fotografía química a digital, y qué equipo empleas actualmente.
El cambio a digital fue fantástico, ya no tenías que esperar para ver tus imágenes, ya no tenias que rezar para que tus diapositivas no sufrieran ningún accidente; perdidas, ralladuras. Personalmente no me costó nada esa transición y las ventajas ya mencionadas se suman a la economía de no tener que gastar en carretes y revelados. El margen de error ahora es mucho mayor, con la diapositiva más de medio punto arriba o abajo y a la basura, amén de disciplinas como la fotografía de alta velocidad. Imaginaos colocar todo el equipo y no saber cómo ha ido la cosa hasta revelar la película…Ahora empleas tres o cuatro flashes y ves el resultado en cuanto a iluminación al momento.
Trabajo especialmente con cámaras réflex de 35mm y me gusta divertirme con las compactas de alta calidad, con ellas la fotografía se convierte en un juego.
¿Qué equipo mínimo recomendarías a alguien que quiera empezar a realizar fotografía de naturaleza?
Una cámara réflex con al menos dos objetivos zoom que combinándolas abarque al menos desde unos 18mm a 400mm. Pudiendo abarcar desde paisaje a fotografía de fauna y permitiéndonos hacer macro con la compra de lentes de aproximación o tubos de extensión. En cualquier caso el equipo se va formando con los años dependiendo de si nos acaba interesando una disciplina más que otra. Si te vas a dedicar a macrofotografía acabarás adquiriendo objetivos especializados como un 150mm o un 24mm para tomas en que se incluye el hábitat, varias unidades de flash, soportes, raíles de enfoque etc.…
¿Y para macro?
Si te vas a dedicar al macro con exclusividad, recomendaría como decía con anterioridad un par de objetivos, ideal un 150 luminoso f2´8 que nos permita acercamientos no excesivos a animales esquivos y aislar en caso necesario nuestro motivo del fondo. Pero en mi equipo cuento también con un 24mm con el que enfoco a 18cm y un 15mm que me permite acercamientos de 20cm. Con ellos obtengo imágenes de animales en su entorno, pero en este caso hablamos de fotografía de aproximación, pues no llegamos a reproducciones de 1x. Pero si queremos superar este rango de ampliación entonces usaremos una óptica especifica u objetivos angulares invertidos que exigirán mucha paciencia y pericia.
SLR Digital, 150mm, ISO 100, f:18, velocidad 1/250, 2 flashes, uno a contraluz
También será imprescindible en ocasiones el uso de flash, y no por capricho, sino por las necesidades del momento. Imaginaos que queréis captar una escena con movimiento, como una araña de la familia de los saltícidos correteando de un lado para otro. En este caso monto la cámara en un soporte de cámara-flashes, y con dos unidades al menos, trato de captar la escena. Por otro lado las escenas con luz artificial no tienen por qué resultar artificiales, simplemente en muchas ocasiones no hay elección, si estás bajo el dosel forestal de un bosque la luz que se filtra es en muchos casos insuficiente. No podemos tampoco olvidarnos de un buen trípode que ha de permitirnos situar la cámara lo más baja posible, mediante la basculación de la columna central. Además contaremos con tubos de extensión, plato micrométrico, linternas etc.…
Macrofotografía, fauna desde hide, fotos empleando barreras, paisaje… ¿Te sientes igual de cómodo, o dicho de otro modo, disfrutas igual con todas las técnicas o tienes especial predilección por alguna?
Todas las disciplinas son atractivas, aunque mi predilección va por la fauna, respecto a si me siento igual de cómodo en todas ellas: hombre, no es lo mismo estar encerrado durante horas con frío o calor en un “hide” que esperar un atardecer y no tienes la misma presión trabajando con rangos de ampliación de 2-1 que de 5x. En cualquier caso, al margen de la dificultad, disfruto muchísimo con cualquiera de ellas, porque todas son fascinantes.
400mm, Fuji Sensi 100, trípode, autodisparador, bloqueo de espejo, f:11, 1 segundo
¿Qué te parece el panorama actual de la macrofotografía en España en comparación con el nivel Europeo?
Creo sinceramente que en España tenemos tanto nivel en fotografía de naturaleza como en otros países, no hay más que ver el cada vez más alto grado de participación en concursos internacionales y los resultados obtenidos. Aunque, en fotografía de aproximación y macrofotografía es necesario cultivar más la composición. A veces hecho de menos imágenes donde la composición tenga especial relevancia, no todo ha de ser primerísimos planos. Por otro lado veo fotógrafos realizando unas imágenes soberbias con luces de día aprovechando las ventajas que nos ofrecen los equipos digitales y esa es una buena línea a seguir. A través de foros como este, descubrimos que los fotógrafos más comprometidos se preocupan por adquirir conocimientos sobre la biología que los conducen a imágenes fantásticas incluso de comportamiento animal. En general diría que tenemos tanto nivel como en el resto de Europa.
¿Qué fue antes, el naturalista o el fotógrafo?
Sin lugar a dudas el naturalista, en mi caso esta es una aptitud congénita por así decirlo. Desde que tengo uso de razón, lo que más ha influenciado mi vida ha sido la naturaleza, la fotografía como digo con anterioridad surgió a partir de los dieciocho años y actualmente con treinta nueve años es para mí una constante.
En fotografía macro hay mucha costumbre de acercamiento y detalle morfológico. Háblanos sobre el uso de angulares para fotografía de aproximación, que es algo que a priori puede sorprender a algunos.
Cuanto más nos acercamos y menos elementos intervienen en la creación de la imagen, menos compromiso tenemos con el aspecto compositivo. El fotógrafo de fotografía de aproximación es decir dentro de escalas de reproducción de 10-1 a 2-1 es un fotógrafo más comprometido en el aspecto compositivo interviniendo en la creación de sus imágenes elementos del entorno del sujeto principal. En este tipo de imágenes es tan importante el espacio positivo como el espacio negativo. Y sin embargo, el especialista en macrofotografía que se mueve en rangos de ampliación de 1x a 10x sabe que el simple hecho de enfocar se convierte en una odisea, con rangos de ampliación de entorno a 5x el fondo puede ser el abdomen de una araña mientras enfocamos su cara. En este caso precisamos de paciencia ilimitada y mucha pericia en el manejo del equipo.
¿Qué recomendarías para abrir los encuadres? ¿Qué elementos o factores tomas en cuanta para lograr una buena composición o captar el ambiente en donde está inmerso el sujeto principal?
Los encuadres amplios dependen de las oportunidades que se te brindan en un momento dado; si te encuentras en un parque natural con un entorno paradisiaco una oruga camuflada en un árbol, la toma puede sugerir fácilmente el uso de un angular. En otras ocasiones tan solo nos interesa el entorno más inmediato utilizando por ejemplo un 100mm distanciándonos un poco para incluir determinados elementos y así reduciendo la escala de reproducción. Me estoy refiriendo en este caso al aspecto estético. Pero si tienes que documentar la vida de por ejemplo la mariposa Papilio machaon, puedes emplear el mismo recurso para realizar una fotografía de una oruga en una planta de hinojo que nace a los lados de una carretera. En fin, depende de la finalidad de la imagen emplearemos unos objetivos u otros.
Compacta digital prosumer, cámara en mano con la óptica en posicion macro a 35mm y flash de relleno
Los fondos lisos tienen poco compromiso y destacan de manera obvia al sujeto ¿Qué nos dirías sobre realizar fondos más complejos?
Como decía en la respuesta anterior, la inclusión de más elementos compromete el resultado final de la imagen, sobre todo en el aspecto compositivo. Debemos situar en el lugar correcto al motivo principal buscando un equilibrio con el resto de los elementos, dicho equilibrio se puede suavizar o forzar con el empleo de iluminación añadida sobre el elemento principal. Muchos fotógrafos huyen de este tipo de imágenes aludiendo a su falta de estética o que resultan confusas, personalmente creo que con este tipo de imágenes enriqueces y diversificas tu banco de imágenes mostrando además más información.
En cuanto a la iluminación y según tu experiencia personal, ¿qué es mejor, luz natural o luz artificial y siendo artificial, cómo iluminas, con qué equipo (flash, difusores, etc.) Y que factores tomas en cuenta para obtener los mejores resultados?
Todos sabemos que con ratios de ampliación cada vez mayores el movimiento se hace más aparente. Con esto lo que trato de decir es que dependiendo de la climatología y las condiciones que se nos brindan para obtener una determinada imagen, nos veremos o no supeditados al empleo de luz artificial. Hay autores que basan la mayoría de su trabajo en el uso del flash, obviamente esto es más sencillo, pudiendo emplear velocidades de obturación altas al tiempo que diafragmamos lo que nos haga falta. Pero con esta metódica no se consiguen imágenes con determinadas luces naturales que surgen en algunos días, representando atmosferas de nieblas y rocíos, estos momentos son mágicos y siempre que puedo los capturo por su esencia sin el empleo de luces añadidas. En otras ocasiones utilizó el flash de relleno, pero siempre que puedo me gusta usarlo con finura de modo que el observador dude de si se empleo o no.
105mm, Ektachrome E 100 VS, trípode, flash de relleno, bloqueo de espejo, f:11, velocidad 1/4
Si la iluminación de la imagen se basa exclusivamente en luz artificial, empleo con frecuencia dos unidades de flash y si tengo que iluminar un fondo emplearía una o dos unidades más. Para obtener los mejores resultados lo más importante es tener claro el esquema de luz que más nos interesa en un momento dado dependiendo de la faceta a destacar en la imagen; volúmenes, texturas, contraluces etc…
En qué modo y medida pueden usarse determinadas fuentes de iluminación artificial sin perjuicio de restar naturalidad a un trabajo. O simplemente es algo a lo que no le das importancia, si la foto es buena por otros motivos.
En este caso entran en juego otras valoraciones como las condiciones climatológicas o si nuestro motivo se mueve, no creo que la luz artificial tenga que restar naturalidad, ni si quiera me lo planteo, es más, en determinados momentos puede ayudarnos a plasmar una imagen de un modo más artístico o enfatizando el movimiento de un animal. Pero hay que ir mucho más allá, si estas documentando la llegada de un insecto a una flor, el equipo de alta velocidad es lo más fiable de cara a obtener los mejores resultados. Debemos como fotógrafos sacar el mejor partido tanto de la luz natural como de la artificial, como de la unión de ambas ya que a pesar de nuestras preferencias, no siempre podremos trabajar en macrofotografía únicamente con luz natural, nuestro objetivo ha de ser multidisciplinarnos con el uso de la luz.
Creo que en macro hay una tendencia bastante generalizada a utilizar solo diafragmas cerrados. ¿Qué sueles hacer tú y qué valoraciones haces al elegir un diafragma más abierto o más cerrado?
De nuevo se impone el ser flexible, debemos observar nuestro motivo y valorar que repercusión tendrá diafragmar más o menos. Si queremos destacar una característica sobre la morfología de un insecto o destacar los estambres de una flor creando desenfoques sinuosos con bellas formas y colores, entonces abrir el diafragma será lo más indicado. Pero si queremos plasmar a un saltícido con su presa cerrar el diafragma nos permitirá plasmar en su plenitud toda la escena.
SLR Digital. 150mm, a f 2,8 buscando la creación de fondos transparentes y uniformes de color, y aislar el bonito ojo de este ofidio
Para terminar con el tema de macro ¿podrías dar algunos consejos, aparte de todo lo ya mencionado, para lograr los mejores resultados?
-Estudiar el tiempo que sea preciso cada motivo antes de afrontarlo, para sacarle el máximo partido, antes de aplicar una u otra técnica.
-Documentarse de manera continuada acerca de la biología de los pequeños animales, abarcando de este modo no solo retratos sino pautas conductuales y de comportamiento; reproducciones, puestas, eclosiones, etc.…
-Ser muy pacientes es una de las piedras angulares de esta disciplina. Cuando localizo una escena interesante sencillamente le dedico el tiempo que haga falta.
SLR Digital, 150mm, flash, velocidad 1/100, f:10
Últimamente estás realizando fotografía de alta velocidad. ¿Qué problemas, esperados e inesperados, has tenido que superar?
Este tipo de fotografía es muy exigente en cuanto a la necesidad de equipo y la aplicación de la técnica. Son tantos los problemas que pueden surgir, que necesitaría mucho espacio en esta entrevista para manifestarlos, en su momento profundizaré en este tema con todo lujo de detalles.
DSRL Digital, 100mm, f:11, velocidad 1/250, iso 250, barrera de infrarrojos, tres flashes a potencias parciales; dos para el herrerillo y uno iluminando las frondas de helechos
Cuál es tu enfoque respecto al trabajo en ordenador. ¿Te planteas realizar retoques “considerables” en una foto? Por ejemplo, si en un escarabajo se te ver reflejado un punto blanco del destello del flash que molesta bastante ¿llegarías a considerar borrarlo?
Me resulta monótono el trabajo de ordenador y en mis imágenes efectúo los ajustes más rutinarios, pero soy consciente de lo que se puede llegar a conseguir durante la edición de la imagen. Sin embargo mi disfrute esta en el campo y no en el trabajo de edición. De hecho siempre que puedo trato de conseguir la imagen final con el trabajo de campo. Valoro el carácter creativo, divulgativo y descriptivo de las composiciones digitales, lo que no hay que hacer es engañar a los demás y decir que has empleado una técnica compleja, como por ejemplo la fotografía estroboscópica cuando lo que has hecho en realidad ha sido clonar varias imágenes en una única toma.
Recientemente estuve fotografiando de nuevo el vuelo de las mariquitas. En mi libro de macrofotografía ya aparece una de estas tomas, para la cual los flashes estaban dotados de difusores, de modo que en sus élitros se refleja en lugar de un punto un rectángulo con la forma del difusor. De modo que en esta ocasión sencillamente no coloqué difusores en los flashes, que dando dos puntos blancos que en contra de lo que pudiera parecer proporcionan sensación de volumen, pero si alguien decide borrarlos si no perjudica el resultado final a mí personalmente no me plantea perjuicios. Conozco un fotógrafo que borra en los ojos de los pájaros todos los puntos de flash menos uno en sus imágenes de alta velocidad y lo dice sin problemas, no deja de ser algo anecdótico y curioso para mí.
SLR Digital, 150mm, trípode, dos flashes, cable disparador, ISO 100, f:18, velocidad 1/125
Si fotografiando un insecto en el campo con un fondo liso se te pasa por ejemplo un pelillo o brizna de hierba, qué diferencia hay en retirarla con la mano en el momento o con el ordenador a posteriori. Sin duda el tiempo que nos esclaviza delante de la pantalla, es recomendable fijarse en esos detalles nimios durante la toma pero que nos pueden robar tiempo a posteriori.
Sueles trabajar en tus entornos inmediatos. ¿Obedece esto a la necesidad de conocer el entorno y la fauna para conseguir buenos resultados, a operatividad, a comodidad o a una intención de partida de crear un discurso que hable de tu lugar? O quizá a todo ello.
Al final la zona geográfica en la que vives es sin lugar a dudas la que mejor acabas conociendo y a este conocimiento es obligado sacarle partido. Debemos recordar que el fotógrafo de naturaleza es un fotógrafo oportunista, además si vives como es mi caso en un lugar que ofrece variedad de hábitats y sus habitantes, esto se convierte en un factor decisivo para la creación de magníficas imágenes.
¿Te planteas cosas como viajar a las islas Shetland para fotografiar frailecillos, o a Costa Rica en busca de una rana determina?
Precisamente estoy planeando un viaje a Escocia o Irlanda para fotografiar aves marinas. Lo del viaje a una selva vendrá antes o después. Este lugar es el paraíso del naturalista, precisamente un buen amigo y uno de los mejores fotógrafos que conozco José Benito, visitó recientemente Costa Rica y sus apreciaciones fueron de asombro especialmente por el tamaño y variedad de la flora, además de las espectaculares imágenes que se trajo consigo.
SLR Digital, 150mm, ISO 200, velocidad 1/250, f:2,8
Descríbenos un día típico de trabajo. Cómo lo planificas, cuánto tiempo sueles invertir, como vas de cargado…
Todo depende de lo que pretenda fotografiar, de modo que si voy a fotografiar aves desde un “hide” me presento a primerísima hora, incluso de noche, dependiendo de la especie. Si voy a dedicarme a la macrofotografía, de nuevo se impone madrugar y estar en el campo al amanecer con las primeras luces y a medida que avanza el día puedo fotografiar aspectos diferentes de por ejemplo la vida los artrópodos. Obviamente no puedo pretender fotografiar libélulas en vuelo a las siete de la mañana de un día fresco pues todavía no estarán activas. Respecto al tiempo invertido. No me gusta tener que mirar el reloj, normalmente no me planteo sesiones por debajo de cinco horas, pero en este sentido pierdo bastante el norte, sencillamente no me gusta trabajar con la presión del tiempo .
¿Cómo preparas cada una de las imágenes, las estudias antes de hacerlas o las realizas según se presente la situación? ¿Vas un día tras otro al mismo lugar en que sabes que suele estar determinado animal, hasta que coincida con las condiciones que tienes en la cabeza?
La respuesta a estas preguntas es positiva en todos los casos. En ocasiones he perseguido una imagen durante años de por ejemplo un determinado comportamiento de un animal, hasta que un día se dan las circunstancias adecuadas. Pero especialmente en las imágenes de insectos al amanecer puedo visitar un pastizal y realizar una prospección a la búsqueda de motivos con rocío, en este sentido me considero una persona muy voluntariosa. He quedado a veces con amigos que trataban de “negociar” la hora a la que quedábamos por la mañana. Parece que muchas personas llevan muy mal lo de madrugar, pero no puedo dejar que eso me condicione, la naturaleza marca sus propios ritmos o los sigues o te quedas sin recompensa, por otro lado, creo que el simple hecho de contemplar un amanecer es una buena recompensa.
¿Hay alguna manera de entrenar la paciencia? Para estar metido en un hide, para estar aguardando a que cese el viento,…
Cuando estás muy motivado con algo, tienes más posibilidades de generar más paciencia. En mi caso esto no es un problema, sencillamente es una constante. Si tengo que esperar con el equipo durante dos horas esperando a que un abejorro acuda a una flor espero, aunque vea que visitan las flores más próximas no moveré el equipo y al final obtengo mi recompensa. En ocasiones por querer captar una determinada luz he tenido que derrochar paciencia a causa precisamente del viento, enemigo número uno del macro fotógrafo, pero casi siempre obtengo el premio. Siendo fotógrafo de naturaleza, también uno se debe de curtir con los fracasos, cuando era más joven sentía más frustración si después de invertir esfuerzo no conseguía nada, pero con el tiempo incluso esta faceta llega a formar parte del juego y lo aceptas sin más. De los errores se aprende mucho y hacen que disfrutes con más plenitud del éxito
SLR Digital con óptica de 15mm, dos flashes en manual y exposición para luz de día, velocidad de 1/50 a f18, ISO100.
Llevas ya 2 libros publicados. “A Coruña. Tan cerca de la naturaleza” y “Fotografía de aproximación en la naturaleza”. Cuéntanos un poco de la experiencia de crear un libro. Cuanto tiempo inviertes, como fueron sus planteamientos de partida, y los quebraderos de cabeza que te ocasionaron, si los hubo.
La creación del primer libro es un proceso lento y laborioso, de pronto, un buen día revisando el archivo producido a lo largo de los años piensas en la posibilidad de crear tu propio libro, te sientas delante del ordenador y creas su estructura con sus diferentes capítulos y entonces, comienzas con la escritura de los textos y poco a poco va tomando forma. A continuación, trabajo en la selección de imágenes y cuando ya lo tengo todo diseño una maqueta que imprimo y que presentaré a la editorial. A partir de aquí viene lo difícil; encontrar una editorial que crea en tu proyecto. Las editoriales como empresas que son, miraran especialmente la viabilidad en cuanto a su comercialización y sopesaran el gasto de la tirada, aunque también es posible buscar patrocinadores con lo cual el riesgo que lleva a cabo disminuye o incluso desaparece en caso de contar con buenos patrocinadores.
Una vez resuelto este punto comienza el diseño y trabajo de lo que será finalmente el libro, es muy importante la buena relación entre los creativos y el autor sacando el máximo partido de ambos. Después de toda esta odisea cuando han transcurrido dos años desde el comienzo lo tienes en las manos no te lo crees. Obviamente otra opción es editarlo uno mismo, pero hay que contar con el capital y con la capacidad de distribuirlo. Podéis creerme cuando os digo que necesitareis más paciencia para el desarrollo de todo este proceso que para realizar las imágenes que lo ilustrarán.
En “Fotografía de aproximación en la naturaleza” incluyes un apartado en el que destacas una serie de fotógrafos. Christian Ziegler, Darline A. Murawski, David Domínguez, Dietmar Nill, Francisco Márquez, Francisco Mingorance, Ingo Arndt, Iñaqui Relanzón, José B. Ruiz, Klein & Hubert, Laurie Campbell, Luiz Claudio Marigo, Martin Harvey, Miguel López Caeiro, Mitsuhiro Imamori, Niall Benvie, Paul Harcourt, Ricardo Vila, Tim Laman y Tobias Bernhard.
Una lista amplia y supongo que muy meditada. Transcurrido un año, ¿querrías añadir a alguien más, o en el caso de que los lectores de esta entrevista los desconozcan, a quién de ellos no debería perderse bajo ningún concepto?
Cuando tuve la idea de contar con colaboradores, no sabía como iría la cosa, siempre recordaré la emoción de ponerme en contacto por correo electrónico inicialmente con Tim Laman, fotógrafo de Nathional Geographic y recibir su contestación y así uno tras otro. Con los fotógrafos extranjeros me comunicaba en ingles pero como no me desenvuelvo en este idioma requerí de la ayuda de varios amigos. Con Dietmar Nill precisé comunicarme en alemán. Finalmente conseguí la veintena incluyendo a mis dos amigos de toda la vida; Miguel y David. A todos les envié una carta contándoles el proyecto y pidiéndoles su colaboración y junto con el texto les adjunté veinte de mis imágenes, a excepción de la fotógrafa Darline a quien solo pude enviarle el texto por problemas con el correo, a lo que me contestó que sería un honor colaborar pero que le gustaría ver una representación de mi trabajo, fue entonces cuando accedió.
Por supuesto a esta lista podrían añadirse más, pero pensé en una cifra redonda y todos los fotógrafos que incluí son increíbles muchos extranjeros han sido para mí, fuente de inspiración durante años, tuve mucha suerte.
Y en otras disciplinas, por ejemplo la mencionada anteriormente de fotografía de alta velocidad ¿quiénes son los fotógrafos que te “espolean” a mejorar? por decirlo de algún modo
Especialmente Stephen Dalton y Kim Taylor, su trabajo genera dosis enormes de motivación
Estás preparando tu tercer libro. ¿Puedes adelantarnos algo, aunque solo sea una fecha aproximada de salida?
Si todo fuera bien, verá la luz para las navidades del año que viene. No quiero que por prisas el resultado final no sea lo que deseaba. Este libro tendrá tras de sí mucho trabajo y uno de mis mayores intereses es mostrar detalladamente cómo conseguir las imágenes que lo ilustran, a través del texto y a través de imágenes y mostrar detalles íntimos de la vida de los animales que lo ilustrarán. Estoy seguro que será del gusto de los amantes de la fotografía y de la naturaleza.
SLR Digital con ópica de 100mm, trípode, dos flashes a potencias parciales, f:18, velocidad 1/250
Tengo la sensación de que los fotógrafos de naturaleza sois muy proclives a mostrar cómo lográis realizar vuestro trabajo, a facilitar todo tipo de datos técnicos y realizar muchas labores didácticas (libros, artículos, foros…). Cosa que en otras disciplinas no ocurre. ¿A qué crees que se debe?
La fotografía de naturaleza suele ser un acto bastante solitario y en mi caso es el puente entre lo que veo y lo que trato de mostrar, en cualquier caso como en otras disciplinas hay fotógrafos reacios a transmitir sus conocimientos adquiridos a lo largo de los años. Personalmente pienso que es muy bonito crear afición y compartir vivencias con otros fotógrafos y bajo esta premisa escribo mis libros tratando de transmitir conocimientos y amor por la naturaleza. Recordemos que no protegeremos lo desconocido, resulta reconfortante ver como la gente cambia de opinión acerca de esos “detestables bichos” cuando observan las imágenes y les cuentas cosas de su vida y como los fotografías, esa ha de ser la esencia del trabajo llevado a cabo.
Y otra sensación que tengo es que para ser fotógrafo de naturaleza también hay que tener cierta maña para “las manualidades”. Hay como una tendencia al “hágalo usted mismo”. Desde cosas pequeñas como anillos inversores o difusores de flash, a cuestiones más elaboradas, como situar un hide en lo alto de un árbol o construir un bebedero para aves (hace poco en Caborian publicamos un artículo de José Benito Ruiz en el que contaba como construyó el suyo). ¿Estoy en lo cierto?
En las imágenes creadas en comederos y bebederos está implícita la capacidad creadora del fotógrafo, seleccionando lugares con una determinada iluminación, seleccionando atalayas llamativas y de un peso visual importante. En la fotografía de alta velocidad, en muchas ocasiones es necesario ser un auténtico manitas a la hora de instalar todo el equipo y es importante disponer de pericia y una buena capacidad resolutiva, estas continuamente dándole vueltas a la cabeza y eso genera un estado de ánimo en cierto grado de euforia que transmite energía vital, te hace sentir realmente vivo.
El artículo de José Benito me pareció sencillamente exquisito, pero tratándose de él no es de extrañar, es excepcional y no solo como fotógrafo sino también como persona. Os contaré una anécdota que lo pone de manifiesto: Cuando preparaba mi segundo libro le pedí que me escribiese el prólogo a lo que él accedió gustosamente, pero posteriormente a la vista de los colaboradores que participaban en él, José me dijo que quizás quedaría mejor el prologo escrito por uno de esos colaboradores, a lo que me negué en redondo, alegando que era un honor para mí que fuese él quien lo escribiese. A través de este detalle es fácil sacar la conclusión de que además de ser un fotógrafo excepcional y prolífico tiene un corazón enorme.
Para concluir, la pregunta más metafísica de todas, que como alguna de las anteriores, ha sido sugerida por usuarios de nuestro foro: La fotografía de naturaleza en general y sobre todo la macrofotografía es una disciplina muy técnica. Tú eres de los que destacan por ir un paso más allá y aportar algo más. Captar la luz, la temperatura y el pulso del entorno ¿es eso fotografiar un sentimiento?
Ese es precisamente mi afán en estos últimos años, el conseguir transmitir un sentimiento que vaya más allá de la propia imagen esa es realmente la trascendencia de la imagen en sí misma. Y él no llegar a conseguir eso es frustrante y desalentador, pero cuando en una charla muestras imágenes y logras cuando hablas sobre ellas empatía con los demás cumples tu objetivo de informador y eso es sencillamente fantástico
Muchas gracias, Luís, por habernos atendido con tanta paciencia.
Ha sido para mí un honor contestar a vuestras preguntas y de verdad os digo que no he requerido de paciencia alguna para ello, solo espero que hayáis disfrutado leyéndola como yo lo he hecho escribiéndola, un auténtico placer. Un abrazo y que la buena luz os acompañe.
DSRL Digital con óptica de 150mm, f:9, velocidad 1/20
Por último, el equipo de redacción de Caborian desea hacer constar su agradecimiento a las personas que han colaborado en la entrevista aportando alguna pregunta: el fotógrafo José B. Ruiz, y los compañeros del foro P.Candela, Chapi, Compayo y Jaleo.
Publicado por Héctor Fdez.