eos_700D

La primera cámara presentada, la EOS 700D, no representa ninguna novedad significativa respecto del modelo que sustituye, la 650D. El dial de modos ahora gira 360º (algo sin duda imprescindible) y los filtros creativos ahora pueden verse en directo en el modo LiveView (no sé cómo he podido vivir sin esto hasta ahora).

Ahora bien, si la cámara no presenta ninguna mejora, el nuevo objetivo presentado en kit con ella, el 18-55 IS STM cuenta ahora con un nuevo autofoco operado por un motor paso a paso que mejorará la velocidad y precisión en el modo LiveView y cuando grabemos video. La cámara, al igual que la 650D, cuenta un autofoco híbrido con píxeles de detección de fase en el sensor pero este sistema sólo explota su potencial real con objetivos STM. También se podrá adquirir con el 18-135 con el mismo tipo de motor.

100D_front

La segunda cámara presentada sí representa una novedad real en la línea. La EOS 100D se presenta como la DSLR más pequeña del mercado, tratando quizás de rivalizar con los sistemas CSC. Comparada con la 700D cuenta con el mismo sensor de 18 megapíxeles, procesador DIGIC V, autofoco híbrido y retiene la mayor parte de los controles directos.

100D_back

Para el resto dispone de la pantalla multitáctil que además de las 650/700D monta la EOS-M y que permite por ejemplo elegir de manera directa el punto de enfoque. Si comparamos los pesos y tamaños no deja muy bien a su hermana mayor para alguien buscando portabilidad y calidad de imagen. Pierde eso si la pantalla basculante. Y el visor no sólo no es pero sino que por un estrecho margen mejora el de la 700D (0,52x por 0,50x, ambas con 95% de cobertura).

 

EOS 700D: 133 x 100 x 79 mm / 580g

EOS 100D: 117 x 91 x 69 mm / 407g

Es decir, un 30% menos en peso y volumen conservando la calidad de imagen.  Los precios de ambas cámaras con el 18-55 STM serán de 900-950 euros para la 700D y unos 850 para la 100D.