Buff, muchas preguntas difíciles de responder en pocas líneas. De entrada, la cámara graba vídeo con una calidad sorprendente, de hecho, supera a la mayoría de cámaras profesionales, mucho más caras, que se pueden encontrar en el mercado. Y eso es debido a dos factores, a saber, el gigantesco sensor de 24X36mm, bastante más grande que el 35mm. cinematográfico (impresionantes desenfoques) y la excelente respuesta en condiciones de baja luz. Otra virtud -off course- es que se puede cambiar de óptica, con todo lo que ello supone.
Ahora vienen las malas noticias. La cámara está capadísima por firmware, de tal manera que no es posible establecer el diafragma, la velocidad de obturación o el ISO, el balance de blancos sí. Sólo puede bloquearse la exposición y compensarla con la rueda trasera. El frame rate está bloqueado a 30fps. El códec de compresión usado no sirve ni para un sencillo visionado, en los movimientos de cámara pega tirones. Ese mismo formato es intratable en la edición, por lo que requiere el paso por un intermediate.
Superados esos límites y con mucha habilidad y conocimientos pueden conseguirse productos como
éste, de un buen amigo.
Ah, otra cosa buena, es una magnífica cámara fotográfica.