Ese es el gran caballo de batalla de la impresión en casa: la fidelidad de color. En mi experiencia personal, es muy difícil llegar a controlar el paso del monitor al papel. Para ello se hacen indispensables un calibrado de monitor y de impresora. Partimos de la base de que el primero ya lo tienes, es conveniente hacerlo cada mes (mínimo). Aquí tiene mucha importancia el monitor: yo uso in EIZO y un LG como segundo. Una vez calibrado ambos se hace patente la diferencia.
Un vez hecho esto, la herramienta básica es la previsualizacion en pantalla (disponible en PhotoShop). Gracias a ella y al aviso de gama nos hacemos la idea más próxima posible de lo que va a salir en papel. Para que ésta función sea realmente útil es imprescindible tener un perfil de impresora, que es el que va a simular PS. Dicho perfil puede ser genérico (el que trae la impr) o especifico. Sin duda este último es con el que realmente se obtienen resultados óptimos. Se trata de un perfil creado para cada combinación de impresora-papel-tinta. Hay empresas que te pueden crear dichos perfiles (copias xl, p ej). La otra opción es comprarte un.calibrador de impresora y hacerte tus propios perf. En mí caso, opté por los segundo, principalmente por el coste. Un perfil "encargado" ronda los 40 leres, para cada tipo de papel que uses. Añade a esto que después de cambiar varios cartuchos de tinta el perfil deja.de ser tan preciso, pese a.usar tinta de la marca. Al tener el perfilador, si noto que varía el resultado, hago uno nuevo y listo...
No me enroyo, que mis dedos morcilla no dan más de si en la pantallita del móvil. Seguiré este tema en cuanto tenga un teclado delante.
Un saludo