Una cosa que se debe tener clara es que Photoshop no "arregla" las fotos gratuitamente. Cualquier retoque lleva aparejado un precio, mayor o menor. Por ejemplo, corregir una distorsión o rotar una imagen unos pocos grados implica una considerable pérdida de calidad (si alguien no lo nota, suerte que tiene
). Igualmente, meterse con las aberraciones cromáticas altera, en cierta medida, la respuesta de color (poco). El viñeteo es lo que más fácilmente se puede compensar sin que se aprecie demasiado, pero no hay magia. A día de hoy, mucha gente tiende, en mi opinión, al abuso de Photoshop y luego, cuando deben hacer una ampliación, pasa lo que pasa.
Otro aspecto problemático es el nivel de saturación y contraste, que no tienen que ver con la calidad de imagen. Muchas lentes de gama muy alta no saturan ni contrastan a penas las fotografías, pero con ellas se obtiene una gama cromática que no puede igualar un gama baja. Las fotos suaves pueden saturarse/contrastarse sin problemas, pero las hipersaturadas/hipercontrastadas ya no se pueden corregir correctamente, puesto que en la propia captura se produjo una pérdida importante de información. De hecho, el exceso de contraste y los colores demasiado vibrantes suelen verse en las compactas y lentes de gama "baja", más bien orientadas a quien no sabe procesar las fotografías correctamente (es típico de muchos EF-S de Canon, como el 10-22). Evidentemente, también existen algunos L que pecan de esto, como el 17-40 f/4.0 L (lo que hace que, si usamos un polarizador, los cielos azules salgan reventados por defecto y casi de un único color). En los mercados realmente profesionales, la tendencia es ofrecer el mayor nivel de información al usuario para que él, de forma consciente, decida los ajustes que aplicará.
Las comparaciones entre objetivos también hay que afrontarlas con pinzas. Deben hacerse en todo el rango de aperturas y, a poder ser, en situaciones que comprometan la calidad final de la imagen (contraluces muy fuertes, presencia de elementos metálicos cromados, condiciones de flareo...). Las conclusiones que se extraigan comparando puntos dulces y en condiciones normales no son demasiado fiables. Además, idealmente habría que trabajar siempre con una full frame, ya que las APS-C pueden disimular un montón de tropelías al no presentar los bordes de la imagen. Finalmente, hay que considerar que tanto las gamas bajas de Sigma como de Tamron pasan unos controles de calidad bastante mediocres y dentro de una misma lente podemos encontrar series francamente buenas y series que no valgan ni para tacos de escopeta (como me sucedió a mí con algunos Tamron en particular), sin embargo, casi todos los L son "iguales" (y digo casi todos, porque en el 17-40 también existen series de diferente calidad).
En cuanto a resistencia y durabilidad... un 70-200 L posiblemente sí sea 3 veces más resistente que un Sigma APO, un Tamron o cualquier otra lente sin sellar. Sencillamente, en algunas ocasiones los primeros se estropearán sí o sí y al otro no le pasará nada. Yo he tenido la mala experiencia de ver como una ola me cubría totalmente mientras hacía fotos con el 70-200 f/2.8 L IS + Canon EOS 350D. La cámara se quedó frita al instante a pesar de que le quité las baterías, etc... así que tuvo que visitar el SAT. El objetivo no sufrió ni el más mínimo desperfecto, simplemente lo limpié con un trapo totalmente empapado en agua dulce y se acabó, otra lente no lo hubiera soportado. Igualmente, el colectivo de profesionales que trabaja con estas ópticas de forma totalmente satisfactoria en condiciones de frío extremo, humedad, barro y salpicaduras es muy numeroso, la serie L no se ha ganado su fama por nada, otra cosa es que necesitemos o no una lente así.
Por último apuntar que, como se comentaba, pueden hacerse fotos estupendas con culos de botella (conozco quien las hace) y auténticas basuras con el equipo más caro (de estos hay a punta de pala). Es lógico, también se pueden crear obras de arte con una Lomo, pero ese es un tema a parte
. En general, y como decía en el primer comentario, hay situaciones comparativas en las que podremos notar diferencias o no, y también existe quien puede salvar casi cualquier cosa con Photoshop, pero si esta última persona dispusiera de un gama alta trabajaría menos y sus ampliaciones lucirían, en muchos casos, bastante mejor. Todo ello no tiene nada que ver para que también existan lentes estupendas de bajo precio (sólo es cuestión de buscar y conocer nuestras necesidades particulares) y algunos L particulares que salgan "rana" por alguna cosa u otra o que, simplemente, no satisfagan las expectativas y no merezcan llevar encima la famosa letrita.
P.D: el que compare un 18-55 con un 17-40 f/4.0 L no defectivo y siga con el 18-55 puede que sí tenga un serio problema o bien que deba tomarse algo más de tiempo para conocer su equipo. He procesado hasta la saciedad fotos tomadas con las dos lentes y la diferencia es, en cuanto las fuerzas un poco, abismal. En cualquier caso, como comenté, hay algún 17-40 mejor que otro (pero ningun como el 18-55) e incluso es posible que algunos presenten problemas de front-focus o back-focus y esto lleve a confusión. Por otra parte, esa gente comparó las lentes en máquinas APS-C (lógico, porque el 18-55 no trabaja en las otras) y, por tanto, la valoración presenta un sesgo que la invalida.