El 400mm en el terreno (1)

Igualmente, el 400 se presenta como una lente capaz de realizar espectaculares retratos desde una distancia muy considerable (incluso en una full frame). Aquí tenemos a Javier, el propietario de Fotocentro. La fotografía ha sido tomada a f2.8 en plena calle y con el estabilizador de imagen activado. Su cara aparece plenamente enfocada, mientras que la zona de las orejas y el cuello de la camisa ya comienza a fundirse con el entorno. El intenso color blanco de la tela no ha sido capaz de generar ningún tipo de problema en cuanto a las aberraciones:


f2.8 IS

En esta otra fotografía, tomada igualmente con el IS activo y a f2.8 (profundidad de campo un tanto escasa, ya que el segundo ojo aparece desenfocado) podemos apreciar lo anteriormente dicho con más detalle: la fusión con el ambiente de las zonas de la cara que están fuera de foco resulta espectacular:


f2.8 IS

El nivel de detalle en los recortes al 100% impresiona. Por otra parte se puede ver sin problemas como el estabilizador de imagen no perjudica en la nada la calidad final de la misma cuando se activa. Es muy recomendable utilizarlo, ya que los 400mm de longitud focal magnifican terriblemente la más mínima trepidación. Su presencia ayuda enormente a eliminar cualquier tipo de movimiento residual, aunque el uso del trípode/monopié siga siendo casi obligatorio, ya que a efectos prácticos con el IS encendido aún necesitamos disparar a 1/250 utilizando una cámara full frame.


f2.8 IS


f2.8 IS


f2.8 IS